Una de las ilusiones más largamente ansiadas por los aficionados a los helicópteros de radio control ha sido poder volar en el salón de su casa. Hasta hace unos pocos años esto era imposible. Sin embargo en los últimos años este sector ha evolucionado de manera exponencial, con los pequeños helicópteros coaxiales primero y monorotores de paso fijo después. De todas las marcas destaca con nitidez E-Flite, con sus modelos pequeños MCX y MCR, que ya se han comentqado en este blog. No pueden decirse sino excelencias de estas pequeñas maravillas que reponden dócilmente a los controles del mando que además es libre de interferencias, y que permiten pasearse por la casa con vuelo de precisión sin golpear cuadros ni plantas y aterrizar en calquier sitio. Después de esto parecía todo conseguido, sin embargo faltaba algo esencial: poder hacer acrobacia en el salón con un helicóptero de paso variable que permitiese volar invertido.
Varias eran las barreras que limitaban este logro: complegidad mecánica (dificil de miniaturizar), peso del modelo, tamaño de los servos, duración de la batería, estabilización de cola, precio excesivo, poca durabilidad, etc. Sin embargo parece que E-Flite lo ha hecho de nuevo, al menos como primera versión. 25 centímetros de rotor principal es suficientemente pequeño, 45 gramos es suficientemente ligero, 3 minutos de vuelo aunque corto es un tiempo suficiente para hacer acrobacias, es robusto como sus hermanos menores, su precio inicial rondará probablemente los 200 dólares y sobre todo, puede volar invertido.
En los ultimos años estamos viendo alcanzarse algunos logros largamente esperados como el coche de radio control a 1/32 (HPI) que nos va a permitir adaptar carrocerías de scalextric. Lo que hace tan solo una década parecía imposible o prohibitivo hoy resulta banal. Nos acostumbramos a gran velocidad a teléfonos de ultima generación inimaginables en las películas de ciencia ficción del siglo pasado. La investigación debe aprovechar este impulso para avanzar hacia soluciones arquitectónicas eficientes, que seguramente tendrán un gran sustrato electrónico. Esto además se puede y se debe explorar con modelos muy pequeños, porque son baratos y rápidos de construir.
El principal avance técnico que ha permitido este prodigioso helicóptero es el giróscopo electrónico de tres ejes, que ha permitido simplificar la mecánica eliminando la barra estabilizadora y reduciendo peso. Su estabilidad y agilidad, además, se ven reforzadas por este sistema. La electrónica sustituye, optimiza y simplifica la mecánica. Este es el concepto que ya hace tiempo mejora el rendimiento de los automóviles, por poner un ejemplo. Confiamos en que la electrónica, que además puede probarse en modelos muy pequeños, sea uno de los motores del cambio arquitectónico del siglo XXI.
Blade MCP, RC Groups
Blade MCP, RC Groups
No hay comentarios:
Publicar un comentario